VALOREMOS LA IMPORTANCIA DE LA EUCARISTÍA, RETOMEMOS EL VERDADERO VALOR DE CRISTO PRESENTE Y VIVO EN ESTE SACRAMENTO.
La Eucaristía sigue siendo el Centro de la Vida Cristiana, y sin embargo es la realidad más Ignorada y olvidada.
Uno tiene que preguntarse si, con tanto alabar la llamada “religiosidad popular” y todo lo positivo que ella pueda tener, no habremos olvidado la gran realidad de Cristo presente y vivo en el Sacramento.
¿Quién puede ser causante de la Ignorancia general de lo que llamamos “nuestro pueblo”, en esto de la Eucaristía? Porque el problema es así de claro: No saben qué es eso. O al menos, viven como si no lo supieran.
Tendríamos que examinarnos a ver si es que estamos haciendo una “religión de Imágenes”, con exclusión práctica de ese otro aspecto eucarístico de nuestra fe. Al menos eso es lo que vemos todos los días.
Ejemplos:
Cada día surge una nueva Hermandad de Penitencia. Pero Sacramental... nada. La Juventud se apunta a Procesiones, pero a oración ante el Sagrario... nada.¡Cuántos entran en la Iglesia y se van derechos a la Imagen! Sagrario... nada.
Vean los que asisten a un Quinario, y los que hay en un Triduo al Santísimo... Porque hay tantos miles en Procesiones y tan poquitos en la Adoración Nocturna. ¿Qué queda después de la Primera Comunión? ¿Sabían lo que recibían? ¿Porqué hay colas para besar una Imagen, y los Sagrarios abandonados y solos?.
La Palabra de Dios y la Eucaristía están por encima de la Imagen, nos guste o no. Y es a ese grupo de personas, que saben lo que traen entre manos en esto de la fe, a quienes les dedico estas líneas, para decirles:
¡Misa, Comunión, Sagrario!. Porque Cristo está allí VIVO, SALVADOR, AMIGO, ALIMENTO.
Y es un buen momento para comenzar a tomar en serio ésto. Y hablarlo en Familia, Reuniones, Cabildos, Publicaciones, Homilías, Catequesis.