La
Cuaresma es un tiempo de reflexión, de penitencia, de conversión
espiritual; tiempo de preparación al misterio pascual.
Es
tiempo para arrepentirnos de nuestros pecados y de cambiar algo de
nosotros para ser mejores y poder vivir más cerca de Cristo.
En
la Cuaresma, Cristo nos invita a cambiar de vida. La Iglesia nos
invita a vivir la Cuaresma como un camino hacia Jesucristo,
escuchando la Palabra de Dios, orando, compartiendo con el prójimo y
haciendo obras buenas.